Nueva Pagina Web


Nos mudamos a una nueva y mejor pagina
Te esperamos en elpiquetero.org


viernes, 7 de diciembre de 2012

[CONTRA CRISTINA Y CONTRA CLARÍN] Vamos por la expropiación de los grandes medios bajo control obrero y popular

Ley de Medios = Ley de Testaferros. La Ley de Medios no defiende la libertad de expresión ni a los trabajadores de prensa.

CONTRA CRISTINA Y CONTRA CLARÍN,
Vamos por la expropiación de los grandes medios bajo control obrero y popular

Los trabajadores de prensa, los medios alternativos y la izquierda tenemos que montar nuestro propio acto en Plaza de Mayo

“'Si esperamos tres años, podemos esperar un par de días más. Pero necesitamos una definición’, afirmó el titular del Afsca, Martín Sabbatella, en diálogo con Radio Continental” (Infobae, 7/12). Las declaraciones de Sabbatella son la confesión de la derrota política que acaba de sufrir el gobierno de Cristina a partir de la extensión de la medida cautelar favorable al Grupo Clarín. Finalmente, ni el 7D ni el 10D el gobierno forzará a desinvertir al Grupo Clarín: toda su política consiste en apelar a la Corte Suprema valiéndose del per saltum votado en el Congreso para que anule la cautelar y habilite la desinversión. El 9D, día en que el gobierno monta un festival en Plaza de Mayo, el kirchnerismo sólo tendrá un nuevo fracaso entre sus manos.

LA DESINVERSIÓN DE LA LEY DE MEDIOS = FESTIVAL DE LOS TESTAFERROS DE LOS MONOPOLIOS MEDIÁTICOS

Toda esta crisis política tiene como epicentro la puja por la redistribución de los medios entre diversos grupos capitalistas, tanto oficialistas como opositores. La Ley de Medios tiene como objetivo vehiculizar esa redistribución. La política del gobierno no es acabar con Clarín como primer paso pasa desmantelar los monopolios mediáticos y entregárselos a las organizaciones populares. Detrás de la fachada de la “desmonopolización” de los medios, lo que se esconde es la creación de múltiples testaferros para preservar la existencia de los monopolios privados vinculados al gobierno. El plan de desinversión presentado por el Grupo Uno de Vila-Manzano “proponen disolver el actual grupo y dividir entre sus socios originales parte de las licencias del Grupo, conformando nuevas unidades productivas a cargo de cada socio o en vinculaciones que, a título personal, no presentan incompatibilidades entre sí (…) Alfredo Vila Santander, por su parte, conformaría una nueva sociedad independiente de SC, con la cual operaría 15 licencias de cable junto con 7 licencias de radios en el interior del país. A su vez, junto a Daniel Vila, se harían cargo de una sociedad que explota dos canales de televisión y una radio en la zona de cuyo. Por su parte, Daniel Vila junto a José Luis Manzano, compartirían la sociedad que opera seis licencias, entre las que se encuentran América TV (con otros socios) y radio La Red, junto a otras del interior. Barbarita Vila asumiría la titularidad de una licencia de una radio de FM en Cuyo” (Urgente 24, 2/12). El objetivo del 7D del gobierno giraba en torno a garantizar esta “desinversión”, o sea, este negociado para los capitalistas. La propia naturaleza del articulado de la Ley de Medios tiene el objetivo de redistribuir las licencias entre titulares privados.

De hecho, para Sabbatella el famoso 7D se reduce a que Clarín siga el ejemplo del Grupo Vila-Manzano. Según Los Andes del 04/12 “El funcionario comentó que la propuesta del Grupo Vila-Manzano incluye su disolución y la división entre sus socios de las radios, canales de televisión y operador de TV por cable que actualmente gestiona, así como la transferencia y venta de unas 30 licencias. Para Sabbatella, lo mismo podrían hacer los dueños del Grupo Clarín 'porque la ley busca que ninguna empresa tenga un tamaño grande'". La Ley de Medios, por lo tanto, es una Ley de Testaferros que preserva la existencia de monopolios privados y públicos en el terreno de la comunicación audiovisual.
LEY DE MEDIOS K: CONTRA LOS TRABAJADORES DE PRENSA Y LOS MEDIOS ALTERNATIVOS, CON LA IGLESIA, LA BUROCRACIA SINDICAL Y LA CENSURA A LOS LUCHADORES

Justamente por ese motivo, la ley no tiene como objetivo defender la libertad de expresión ni a los trabajadores de prensa. El 7D del gobierno no iba a acarrear el aumento del salario de los trabajadores de los medios ni la defensa de sus derechos a organizarse política y sindicalmente. Muy por el contrario, la reestructuración pone en riesgo sus puestos de trabajo, dado que el objetivo del gobierno es imponer personal que responda al kirchnerismo.

En esa misma línea, AFSCA no otorga a los medios de comunicación alternativos el 33% destinado a las “organizaciones sin fines de lucro” dado que busca censurar a todos aquellos que expresen de una u otra forma la lucha popular. No es casualidad que los K cuenten como uno de sus aliados en la pelea contra el Grupo Clarín al propio Bergoglio: “el arzobispado de Buenos Aires –que Bergoglio aún conduce– se propuso poner en marcha lo que, puertas adentro, se conoce como el principal proyecto comunicacional de la Iglesia: el canal 21, el canal del cardenal. Se trata de una señal de televisión abierta que pertenece al arzobispado porteño y cuenta con una autorización que le concedió el ex COMFER en 2005, durante la gestión de Julio Bárbaro, y en el inicio del primer período de Bergoglio al frente del Episcopado. Desde entonces, la esgrima silenciosa entre Clarín y el jesuita no hizo más que profundizar las diferencias. En el canal se quejan porque, con el argumento de que es anticomercial, Cablevisión no lo sube a la grilla pese a que se trata de un canal de TV abierta. El 21 se puede ver de 8 a 16 en el canal 78 de Cablevisión, lo que equivale para Bergoglio a una especie de confinamiento que no le permite llegar a donde quisiera (…) Paradojas del 7D, Bergoglio, que se para en las antípodas del kirchnerismo en muchos temas, acompaña en este caso en silencio. ‘En este tema, la relación es muy buena’, admiten (…) Se nos van cerrando los caminos’, dice Rimoldi, el director del canal, que es uno de los más fastidiados con el asunto y asegura contar con todo el respaldo del cardenal. ‘Es mentira que cumplen con ley. Ninguno lo hace’, dice Rimoldi. El artículo 65 de la Ley 26.522 obliga a los cableoperadores a incluir en la grilla a los canales de televisión abierta en su zona de influencia. Y asegura que desde la AFSCA, que ahora conduce Martín Sabbatella, los ayudaron muchísimo en todas las gestiones” (Tiempo Argentino, 7/12).

Por otra parte, mientras los medios populares no han sido beneficiados en nada, la utilización de la Ley de Medios por parte de la propia burocracia sindical es grosera. Para dar un ejemplo, el sitio web www.patagonesnoticias.com.ar denuncia que “la UOCRA destinó $ 5 millones (US$ 1.250.000) durante 2 años para comprar el Canal 4 de televisión abierta de la Ciudad de Buenos Aires, que era un canal comunitario de San Telmo, para convertirlo en el canal Construir TV y subir su señal a la plataforma de la TV digital abierta, que gestiona Tristán Bauer, responsable de los medios públicos. La plataforma de TV digital estatal en la que se puede ver Construir TV está integrada por otras 15 señales, entre ellas los canales 7 y 9, las señales de noticias C5N, CN23 y Telesur, los educativos Paka Paka y Encuentro, y el deportivo Gol TV.” O sea que la TV digital abierta es una usina proseletista del kirchnerismo que sirve como para plataforma para el agente del Batallón 601, Gerardo Martínez. Sin palabras.

La naturaleza reaccionaria de la Ley de Medios, por lo tanto, se verifica no sólo en su carácter capitalista sino también en estos hechos concretos. En última instancia, no es menor que su autoridad de aplicación está designada por un gobierno que transa con la Iglesia, ataca los derechos de los trabajadores de prensa y censura al conjunto de los luchadores. El gobierno de la Ley Antiterrorista y la reforma proscriptiva contra la izquierda nunca podrá ser un gobierno que “democratice” los medios de comunicación.

LA DESINVERSIÓN Y LA LEY DE MEDIOS NO SON UN PASO ADELANTE EN LA LUCHA CONTRA LOS MONOPOLIOS: ES UN NUEVO NEGOCIACIADO PARA LOS CAPITALISTAS CONTRA LOS MEDIOS ALTERNATIVOS

En este marco, los medios alternativos, agrupados mayoritariamente en la Red Nacional de Medios Alternativos (RNMA), han lanzado una campaña cuyas consignas son: “SI a la desconcentración, NO a los monopolios privados o estatales. Sin legalización de los medios populares, alternativos y comunitarios no habrá democratización”.

La campaña tiene la virtud de poner sobre la mesa el hecho de que el gobierno discrimina a los medios alternativos y vinculados a distintas organizaciones populares. Sin embargo, tiene el claro límite de reivindicar la Ley de Medios y, por ende, la desinversión promovida por el propio kirchnerismo.

De hecho, dentro de ese espacio milita el Frente Popular Darío Santillán que emitió un comunicado junto a Marea Popular y otros grupos, afirmando que “lamentamos que haya jueces y camaristas que estén al servicio de intereses minoritarios y exigimos que las instancias judiciales superiores (en este caso, la Corte Suprema) se pronuncien de manera unívoca en torno a los plazos de desinversión del Grupo Clarín y el resto de los grupos (Vila-Manzano, Cristóbal López, Cadena 3, etc). Si el 7D es el fin del ejercicio monopólico de las licencias por parte de los multimedios, allí estaremos para festejar. Al mismo tiempo, acompañamos los avances en materia de comunicación que implicó la creación de un ente de control federal y democrático como el AFSCA”. Es decir que respaldan abiertamente la política del kirchnerismo de apelar a la Corte Suprema para que resuelva a favor de la “desinversión”.

Marea Popular, luego de eso, decidió hacerse más kirchnerista que los propios K y planteó que “el Estado nacional puede, y debe, actuar de oficio a través del AFSCA para hacer cumplir la ley” (Declaración de MAREA Popular a raíz del 7D, 6/12). Este partido político chavista promueve la intervención estatal directa para ordenar la redistribución de los medios a manos de diversos grupos capitalistas.

La política de los compañeros de la RNMA pretende lograr el desarrollo de los medios alternativos en paralelo a la existencia de los monopolios privados o estatales, porque la realidad es que la “desinversión” no implica la “desmonopolización” sino la recreación de las condiciones monopólicas bajo otras formas jurídicas.

LOS MEDIOS ALTERNATIVOS TIENEN QUE ROMPER CON LA LEY DE MEDIOS Y LUCHAR CON LOS TRABAJADORES DE PRENSA Y LA IZQUIERDA POR LA EXPROPIACIÓN DE LOS GRANDES MEDIOS DE COMUNICACIÓN

Por lo tanto, la salida no pasa por buscar ampararse bajo el ala del kirchnerismo y su ley para garantizar la democratización de los medios, sino que por el contrario la clave pasa por unificar a los trabajadores de prensa de los monopolios privados y públicos con los medios alternativos y desarrollar una lucha común tanto contra el gobierno como contra Clarín.

Justamente, para defender la libertad de expresión y los derechos de los trabajadores de prensa, hay que acabar con la monopolización de la comunicación audiovisual expropiando los grandes medios bajo control de los trabajadores y las organizaciones populares. Sólo así vamos a generar el terreno para el desarrollo de medios de comunicación propios de los trabajadores y los luchadores, que garanticen el pleno desenvolvimiento de la libertad de expresión.

Con esta posición, llamamos a los trabajadores de prensa, los medios alternativos y la izquierda a montar nuestro propio acto en Plaza de Mayo el próximo 10 de diciembre.

7 DE DICIEMBRE DE 2012

TPR
TENDENCIA PIQUETERA REVOLUCIONARIA
correotpr@gmail.com // tpr-internet.blogspot.com // Facebook: TPR Tendencia Piquetera Revolucionaria // Tel: (011) 156 335 9278

No hay comentarios:

Publicar un comentario