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lunes, 28 de abril de 2014

[EGIPTO] DECLARACIÓN DE LA TPR - ¡ABAJO LAS PENAS DE MUERTE EN EGIPTO!

EGIPTO: un 24 de marzo, en un juicio de 45 minutos, una dictadura militar condenó a pena de muerte a 529 luchadores

¡ABAJO LAS PENAS DE MUERTE EN EGIPTO!
¡ABSOLUCIÓN DE LOS 1200 PROCESADOS POR LUCHAR!

ARGENTINA - ACTO EN LA EMBAJADA DE EGIPTO - 28/04 - 10:30HS

Flyer del acto frente a la Embajada de Egipto en
Buenos Aires - Argentina
Un fallo sin precedentes contra la revolución árabe ha despertado la indignación mundial. En el Tribunal Penal de Minia, al sur de El Cairo (Egipto), se está llevando adelante un juicio infame que podría terminar en la pena de muerte a 1200 luchadores. Es un hecho gravísimo porque, de consumarse, sería la condena a pena de muerte más grande en toda la historia de Egipto y probablemente mundial. 

UNA LUCHA DE PROPORCIONES HISTÓRICAS

Esta brutalidad por parte de la dictadura militar no es sólo un acto de sadismo sino que tiene un objetivo político preciso: intentar amedrentar a la marcha más grande de toda la historia de la humanidad. Recordemos que esta dictadura surge para cooptar y aplastar a más de 30 millones de personas que se movilizaron el pasado 30 de junio de 2013 por la renuncia de Mursi. Desde un primer momento, esta dictadura se propuso el objetivo contrarrevolucionario de defender al régimen de Mubarak y derrotar la tercera ola de la revolución egipcia.

EL DICTADOR AL-SISI: UN GOLPISTA CONTRARREVOLUCIONARIO

La primera ola fue contra Mubarak en 2011, la segunda ola fue contra el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas en 2012 y la tercera ola fue contra Mursi en 2013. Es este proceso revolucionario lo que quiere aplastar la dictadura militar. Por eso, con nuestra campaña internacional tenemos que rodear de solidaridad a los revolucionarios egipcios y desacreditar internacionalmente al dictador Abdel Fattah al-Sisi. Se trata de una pulseada política directa con la dictadura donde se juega el destino mismo de la revolución árabe.

529 PENAS DE MUERTE, UN 24 DE MARZO

Otro hecho simbólico despierta nuestra indignación como luchadores argentinos: los 529 compañeros que ya tienen sentencia provisional fueron juzgados el pasado 24 de marzo. Es decir que mientras nosotros marchábamos en repudio a la última dictadura militar que hubo en Argentina y por los 30.000 compañeros detenidos-desaparecidos, en Egipto el 24 de marzo de 2014 una dictadura militar estaba condenando a pena de muerte a 529 compañeros. No lo podemos permitir.

DE LAS HERAS A PLAZA TAHRIR: LIBERTAD A LOS PRESOS POR LUCHAR 

Los puntos de contacto con nuestro país no terminan ahí. De igual manera que a los petroleros de Las Heras se los acusa por el asesinato del oficial Sayago en una pueblada, a los compañeros se los acusa por el asalto de una comisaría de la ciudad de Minya donde fue asesinado el asistente del comisario, el coronel Mostafa El Attar. Los procesados fueron sentenciados también por intentar asesinar a un subteniente y a un policía en esa comisaría, apoderarse de armas e incendiar el edificio. Los hechos ocurrieron el 14 de agosto, el mismo día que el ejército y la policía mataron a más de 700 manifestantes que participaban de un acampe de protesta pro Mursi en el distrito de Rabaa. El asalto a la comisaría se ubica entonces, como se ve, en el contexto de una indignación popular ante la masacre perpetrada desde el poder político y el aparato represivo contra la protesta contra el golpe ese mismo día. 

De esta forma, al igual que en el caso de los compañeros de Las Heras, se pretende juzgar colectivamente a todos los que participaron en un auténtico levantamiento popular como si la protesta social fuese “partícipe necesario” en un supuesto complot para asesinar 1 policía. Se trata de una aberración jurídica. Y la respuesta será… que el Estado asesine 1200 personas sin nada que pruebe una responsabilidad personal en ningún delito. Advertimos, entonces, que de concretarse las condenas a pena de muerte no sólo será un ultraje a los compañeros sino que pesará como una jurisprudencia nefasta sobre los luchadores del mundo entero. Al igual que con Sacco y Vanzetti, se trata de un juicio político contra la clase obrera a nivel mundial.

BASTA DE REPRESIÓN Y PROSCRIPCIÓN A LA HERMANDAD MUSULMANA

Para peor, en total contraste con estas condenas brutales, por el asesinato de 37 manifestantes la policía tuvo penas mínimas. Tan solo a 1 policía se le dio 10 años de prisión y a otros 3 se les dio 1 año de prisión en suspenso. O sea, una provocación total contra los luchadores de Egipto y los pro Mursi en particular. No conforme con esto, el sábado 26 de abril el mismo juez decidió encarcelar a otros 37 manifestantes pro Mursi con penas que van de 5 a 45 años y a otros 11 por 57 a 88 años. 

La represión también ha caído sobre periodistas de Al Jazeera (pro Mursi) como Peter Greste, Mohammed Fahmy y Baher Mohamed arrestados sin ninguna prueba en diciembre de 2013 bajo los cargos de “terrorismo” y “armar noticias falsas”. Un cuarto periodista, Abdulla al-Shami, estuvo preso durante 6 meses sin ninguna prueba. Desde la TPR, exigimos su absolución y libertad inmediata.

En este mismo sentido se ubica el cierre de los comedores, la proscripción del partido político de la Hermandad Musulmana (HM) y la declaración de la propia Hermandad como “organización terrorista”. Según Amnistía Internacional, al menos 1.400 de sus miembros han sido asesinados y varios miles más fueron encarcelados. Por eso entre los 1200 procesados se encuentran Mohamed Badía, líder espiritual de la HM y el presidente de lo que fue su brazo político, Partido Libertad y Justicia (PLJ), Saad al-Katatni. Vale aclarar, sin embargo, que de los 1200 procesados… sólo 22 son parte de la Hermandad y el resto serían sus “cómplices”. 

La dictadura pretende vincularlos a Al-Qaeda y los grupos armados que operan en la Península de Sinaí. Concretamente a “Ansar Beit Al-Maqdis” (Campeones de Jerusalem) y a “Ajnad Misr” (Soldados de Egipto). Se trata de un operativo militar que cuenta con el apoyo directo de Estados Unidos (mandaron 10 helicópteros Apache) en lo que describen como “la insurgencia militar islamista más grande en toda la historia de Egipto”. La HM, por el contrario, ha aclarado reiteradas veces que no sostiene ese método de lucha. 

Denunciamos, a su vez, que la orientación de proscribir a la Hermandad es abiertamente pro-imperialista. Según relata el diario El Mundo en su edición del 20 de abril, Bernardino León, enviado especial de la UE para el Sur del Mediterráneo, declaró: “Lo que sí quiero subrayar es que una cosa es que la Hermandad no sea una organización terrorista, que no creemos que lo sea, y otra diferente que creamos que en un sistema plenamente democrático la Hermandad podría integrarse sin más”. Se trata de una extorsión política y una abierta complicidad con la dictadura militar. Por eso la UE pondrá “veedores” para legitimar las próximas elecciones truchas.

Por lo tanto desde la TPR, subrayando que nosotros apoyamos enfáticamente la marcha del 30-J por el ¡Fuera Mursi!, exigimos el cese de la proscripción de la Hermandad Musulmana, denunciamos los asesinatos y las detenciones y advertimos que la supuesta “lucha contra el terrorismo” de al-Sisi sólo apunta a justificar la militarización completa del país.

NO A LOS JUICIOS MILITARES A LOS CIVILES. ABAJO LA LEY ANTI-PROTESTA

Una prueba contundente de esto es que los atentados tomaron un volúmen mayor recién en diciembre mientras que al-Sisi convocó a movilizaciones populares para reprimir a la Hermandad a menos de un mes de que asumiera, el 26 de julio de 2013. 

Fue en octubre, a su vez, que lanzó la ley anti-protesta y la aprobó en noviembre. Según esta ley, las marchas deben estar notificadas a las autoridades con al menos 3 días de anterioridad. Las penas van desde fianzas hasta ser encarcelado. Cualquier parecido con la ley anti-piquetes en argentina no es casualidad. Los resultados no se hicieron esperar.

El 3 de diciembre, Ahmed Douma fue detenido en su casa por participar de la marcha organizada por la campaña “No a los juicios militares a civiles”. El 22 de diciembre fue sentenciado junto a Ahmed Maher y Mohammed Adel a 3 años de prisión con trabajos forzados. Los 3 compañeros son jóvenes dirigentes del movimiento 6 de abril. 

Inmediatamente después, en enero, fue sentenciada a 2 años de prisión la abogada y militante de Socialistas Revolucionarios Mahienour el-Masry. Lo mismo pasó con Hassan Moustafa y con otros tres activistas: Lu’ay Al-Qahwagi, Amr Hafez y Nasir Abu-al-Hamd. La causa que se les imputa es por participar de una protesta contra una comisaría en Alexandria por el asesinato de Khaled Said - uno de los símbolos de la lucha popular contra Mubarak y de la revolución egipcia.

Por todas estas causas, este mismo 26 de abril, se hizo una protesta ante el palacio presidencial en el Cairo exigiéndole al presidente interino, Adly Mansour, que suspenda la ley anti-protestas.

NO A LA CONSTITUCIÓN Y LAS ELECCIONES TRUCHAS

Se trata, por lo tanto, de la militarización completa de Egipto bajo el mando de la bota militar. ¿Se puede hablar de nuevas constitución y convocatoria a nuevas elecciones en este contexto político? De ninguna manera. Es un fraude total. 

La dictadura pretende legitimarse con la farsa de que ellos salvaron a Egipto de la Hermandad Musulmana y garantizan una institucionalización hacia un Estado democrático. Esto también es falso y debe ser denunciado.

La constitución, votada por referéndum en Enero y redactada por un comité de 50 miembros que terminó cooptando a fuerzas de oposición e incluso a Tamarod (la campaña que juntó las 22 millones de firmas contra Mursi), no es un paso adelante sino que refuerza el poder del aparato militar. Tan trucha fue la campaña por el referéndum que quienes hacían campaña por el NO directamente eran encarcelados.

Como denunciaron los compañeros del “Frente camino hacia la revolución”, “la nueva constitución fortalece el poder militar. Su artículo 203, hace que el parlamento no tenga poder para discutir el presupuesto militar; sólo el consejo militar puede discutirlo. Además, con el artículo 234, se establece que el presidente no pueda designar su ministro de Defensa salvo que tenga la aprobación del consejo militar. Por último, debido al artículo 204, los civiles podrán ser juzgados por tribunales militares”.

Respecto a las elecciones, las mismas son tan truchas que la inmensa mayoría de los partidos ya han anunciado que no se presentarán o las boicotearán abiertamente. La lista oficial se anunciará el 2 de mayo y se votará el 26 y 27 de Mayo pero ya se sabe que, como máximo, se presentarán dos candidatos: uno de tendencia nasserista, Hamdin Sabahi… y el propio al-Sisi. Tan trucho es todo que hasta The Guardian ha señalado que esta elección es “simbólica”. De esta forma, pasaríamos de tener 13 candidatos en las últimas elecciones de 2012 a tan sólo 2 en esta o, incluso, tal vez candidato único según lo defina la justicia electoral. 

Esta elección totalmente fraudulenta excluye, también, a cualquier candidato de la HM o islamista. Esto es importante porque de los 13 candidatos de las elecciones anteriores el elegido por el voto popular fue Morsi y esas elecciones fueron los segundos comicios democráticos en toda la historia de Egipto. El antecedente eran las legislativas de 2011 en las que también se impuso el Partido Libertad y Justicia (PLJ), brazo de la HM. Por lo tanto, hablar de “elecciones libres” en Egipto con la HM proscripta y sin ningún candidato islamista es una farsa mayúscula y evidente.

Por eso Khaled Ali, abogado de derechos humanos que fue candidato presidencial en 2012 y en el que se referencian varios sectores de la izquierda, declaró que no se iba presentar esta vez porque considera que es “una farsa” y señaló que sólo se presentaría “si la ley electoral es modificada, la ley anti-protestas es cancelada y si liberan a los activistas encarcelados”. 

Así las cosas, en caso de que ninguno de los aspirantes se imponga por mayoría absoluta en primera ronda habrá una segunda los próximos 16 y 17 de junio y luego habrá elecciones legislativas en julio ya que, según la Constitución aprobada en enero, las legislativas deben celebrarse en un plazo de seis meses tras la ratificación de la Carta Magna. Desde la TPR impugnamos estas elecciones por truchas y llamamos a la izquierda y los luchadores egipcios a impulsar una enérgica campaña por el boicot. Esta campaña no puede ser pasada por alto porque el resultado de estas elecciones condicionará directamente las elecciones parlamentarias y todo el proceso político. 

SOLIDARIDAD CON LOS ESTUDIANTES EGIPCIOS EN LUCHA CONTRA LA DICTADURA

Por otra parte, queremos saludar y solidarizarnos con la heroica lucha que el movimiento estudiantil egipcio está llevando adelante contra la dictadura de al-Sisi. 

Organizados en los SAC (“estudiantes contra el golpe”, por sus siglas en inglés), la Universidad de Al-Azhar, la casa más prestigiosa de estudios islámicos sunitas, fue el sitio de numerosas protestas desde la caída de Mursi. El movimiento tomó tal masividad que rápidamente se extendió a la Universidad de Zagazig, de Alexandria, de Ain Shams, del Cairo, de Mansoura y de Beni Suef. 

La respuesta de la dictadura fue más represión. Cientos de estudiantes fueron arrestados y al menos 8 estudiantes fueron asesinados por las fuerzas de seguridad. Atta Ahmed y Ahmed Abdel-Hafez fueron asesinados por la balacera policial a la salida de los dormitorios universitarios del Cairo. En Beni Suef, Amr Mohamed Ali Kafaty, de 13 años, fue asesinado en los choques con la policía. Según los medios, se trató “de un tiro al aire”. 

A su vez, 16 estudiantes de Al-Azhar fueron condenados a 3 años de prisión por las protestas estudiantiles de diciembre. En un juicio separado, 17 otros estudiantes fueron condenados a la cárcel por 14 años. 

Toda esta fortísima ofensiva represiva contó con el apoyo abierto del Consejo Supremo de las Universidades que el 24 de febrero aprobó un protocolo con el Ministerio del Interior para que las fuerzas de seguridad puedan ingresar al campus universitario con su permiso. Se trata de una violación alevosa del principio de la autonomía universitaria para entregar a los estudiantes al aparato represivo del Estado. En la misma línea, 25 estudiantes fueron expulsados de la Universidad de Al-Azhar por “alborotadores” y la dirección suspendió a 39 estudiantes por períodos que van desde 1 semestre a 2 años.

Desde la TPR, nos colocamos firmemente junto a la protesta de los jóvenes egipcios, exigimos el juicio y castigo por las víctimas, libertad a todos los detenidos y la anulación de todos los sumarios universitarios en su contra. En este sentido, tomamos como propia la tarea de que las organizaciones estudiantiles de América Latina se pronuncien en solidaridad con el estudiantado egipcio.

CAMPAÑA INTERNACIONALISTA EN DEFENSA DE LA VIDA DE LOS 1200 COMPAÑEROS

Para finalizar, queremos dedicar nuestras últimas palabras a un gigante: nos referimos al movimiento obrero egipcio. Según el Centro Egipcio para el Desarrollo Internacional, en 2012 hubo 3.800 huelgas y en la primera mitad de 2013 (último tramo del gobierno de Morsi), 5.500 huelgas y protestas. La cosa no se detuvo ahí: sólo en enero de 2014 hubo más de 150 huelgas contra la dictadura militar. De hecho, la renuncia del presidente militar en enero, anunciada por el propio primer ministro, se produce en medio de una serie de huelgas. Entre ellas, las de trabajadores del servicio de transporte público y los recolectores de basura. No por nada la revolución egipcia es conocida como la revolución más obrera de toda la revolución árabe.

A su vez, en oposición al llamado de al-Sisi a movilizarse el 26 de julio de 2013 “contra el terrorismo” surgió un nuevo grupo político: “la tercera plaza”. Ellos se describen a sí mismos como “un grupo de jóvenes que no se sienten representados por la Plaza Tahrir (hoy militar) y la Plaza Rabia Al-Adawiya de la Ciudad Nasr (HM)”. Esto fue lo que luego permitió el surgimiento del bloque “Frente camino hacia la revolución”. De igual forma, contra la cooptación de Tamarod por la dictadura de al-Sisi, ha surgido Taharor y la Federación de Sindicatos Independientes de Egipto han desautorizado a quienes se integraron. En todos los casos, se tratan de distintas tentativas del activismo por expresar un alineamiento independiente en la situación política y abren una posibilidad. 

Es en este cuadro político concreto que sabremos la sentencia el próximo lunes 28 de abril. Primero se definirá la situación de los 529 compañeros y luego se iniciará el juicio por otra tanda de 683 compañeros. Por lo tanto, para quienes defendemos la revolución egipcia, es una obligación movilizarnos a las embajadas de Egipto este 28 de abril y de aquí en más. Sin ir más lejos, el 20 de mayo se definirá la situación de la compañera Mahienour el-Masry, luego tendremos las elecciones presidenciales y luego en julio las parlamentarias. Son todas oportunidades para que se haga escuchar la voz de los luchadores en el mundo entero.

Desde la Tendencia Piquetera Revolucionaria (TPR) de Argentina, llamamos a impulsar una campaña internacional de actos en repudio a las penas de muerte en Egipto y por la absolución de los 1200 compañeros. Saludamos todas las iniciativas que apunten en este sentido como puede ser la campaña “Egypt solidarity initiative” (campaña a la cual adherimos como TPR) e invitamos a todas las organizaciones de izquierda, anti-imperialistas, sindicatos y centros de estudiantes a pronunciarse y sumarse a esta lucha.

¡Abajo las penas de muerte en Egipto!
¡Absolución de los 1200 compañeros procesados por luchar!

27/04/2014

TPR
Tendencia Piquetera Revolucionaria
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