Traducción realizada por Juan Marino
La campaña está en marcha
Rui Costa Pimenta es el pre-candidato del PCO para la presidencia de la República
Vea cómo fue el acto de lanzamiento de la pre-candidatura del PCO
El sábado pasado, 14 de junio, el Partido de la Causa Obrera realizó un acto en San Pablo para lanzar la candidatura presidencial de cara a las elecciones de 2014.
El acto fue realizado con la participación de militantes y simpatizantes del partido provenientes de todo el país, y se llevó a cabo conjuntamente con un análisis de la situación política nacional e internaciona. Se conmemoró, al mismo tiempo, el 35° aniversario del periódico Causa Operária y se presentó el nuevo portal online de Causa Operária, la página del PCO en internet.
Candidatura obrera y socialista
En la apertura del acto, Antonio Carlos Silva, miembro de la dirección del Partido, de la coordinación sindical y de la corriente “Educadores em Luta” (Educadores en Lucha), explicó que el PCO participa de las elecciones “para usarlas como tribuna en defensa de la clase trabajadora” y por eso una de las consignas del partido es “salario, trabajo y tierra”.
Resaltó que la lucha central es por la independencia de los trabajadores y que “no vamos a hacer promesas, sino presentar un programa de lucha y por la construcción de un partido obrero y revolucionario”.
Fue en este sentido que presentó al compañero Rui Costa Pimenta, un “destacado militante que colocó su vida al servicio de la construcción de una prensa obrera, independiente, y un verdadero partido de los trabajadores”, como el pre-candidato del PCO a la presidencia de la República.
Análisis político
En su presentación, el compañero Rui Costa Pimenta hizo un análisis de la situación política y dijo que el partido no se pretende integrar al régimen político burgués. El análisis comenzó presentando un panorama desde la dictadura militar hasta el problema de la etapa política actual que es la polarización entre los bloques fundamentales de la burguesía, especialmente desde la crisis mundial de 2008.
Desde el punto de vista de los partidos, esa polarización se consolida en la lucha entre el PT y el PSDB, o sea, entre sectores que representan al sistema financiero internacional, los bancos, y los capitalistas medios, inclusive la burocracia sindical, etc. “Esa es una lucha por el presupuesto del país y por las palancas que controlan la política nacional y las relaciones internacionales”.
Una comprensión de esa situación es fundamental para actuar y luchar por la independencia política de la clase obrera. Su incomprensión, por otro lado, como ocurre con la izquierda pequeño-burguesa que piensa estar en el centro de la lucha política nacional, lleva a esa izquierda a aproximarse cada vez más a la derecha, al imperialismo, distanciándose de la clase obrera.
Si la expectativa de sectores de izquierda es derribar al PT, sería necesario preguntarles “quién va a hacer eso y, principalmente, quién va a sustituir al PT”.
Entender eso es entender que el imperialismo vive su mayor crisis desde el final de la II Guerra Mundial. Y que “donde el imperialismo no consigue controlar el régimen político a través de las elecciones, por medios más o menos pacíficos, utiliza golpes violentos”. Es lo que estamos viendo en América Latina y, más recientemente, en Ucrania, Tailandia, Egipto, etc.
Brasil, como una economía gigantesca y como el principal país después de Estados Unidos en América, no está fuera de ese contexto. Basta ver cómo crece la campaña contra el país internacionalmente. Se crea un clima típicamente golpista. Con el crecimiento de organizaciones de extrema derecha, y el financiamiento directo de una militancia joven, especialmente en las universidades.
Las elecciones ocurren en ese marco político. De lucha polarizada entre el PT y el PSDB. Una lucha por el poder del estado, en la cual el partido revolucionario debe posicionarse contra el golpe de la derecha.
Elecciones
Las candidaturas de Eduardo Campos y Marina Silva son de derecha. De eso no puede haber duda. Y las candidaturas de los partidos de la izquierda pequeño-burguesa? No es necesario decir mucho. Basta ver la realidad del PSOL.
Qué decir de un candidato que es un aliado de la familia Sarney, en Amapá, y que se alió con el DEM en las últimas elecciones, como Randolfe Rodrigues, que acaba de renunciar a la candidatura abriendo el espacio para Luciana Genro que tal vez sea todavía más una representante de los capitalistas? Es siempre importante recordar que ella, en las últimas elecciones, fue financiada por Gerdau, la misma empresa que financia al Instituto Milenium que forma parte de una operación internacional contra-revolucionaria.
Rui Costa Pimenta esclareció que el centro de la participación del PCO en las elecciones será una “campaña partidaria, donde el candidato es el PCO”. Esto porque la principal defensa y propaganda será en torno del partido política independiente, revolucionario y socialista de la clase trabajadora.
Para ello será necesario combatir la idea de que el partido es una cosa errada. “Sin partido, la clase obrera será siempre esclavizada por la burguesía”, completó.
Destacó el cerco judicial del TSE (Tribunal Superior Electoral), “todo lo que tenemos como posibilidad de propaganda son nuestros propios medios”, por eso, y por otro lado, es importante no tener ninguna expectativa de que la prensa divulgará a nuestro partido. “Se van a esforzar para que no hablemos nada, porque las elecciones son el momento de mayor dictadura del régimen que se dice democrático”.
Rui Costa Pimenta destacó la necesidad de hacer propaganda en torno a la asamblea constituyente, contra la represión, por la disolución de la Policía Militar, el salario mínimo vital, la reforma agraria, en defensa de la estatización del petróleo y, de manera especial, el fin de la cartelización de la prensa, entre otros.
En ese sentido, será necesario “enfrentar firmemente todas esa barreras, hablar con el pueblo y para el pueblo, para hacer progresar el proceso de la revolución obrera en Brasil”, concluyó.
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