DOCUMENTO POLÍTICO DE LA SEGUNDA ASAMBLEA ABIERTA DE LA TPR
20-N: TRANSPORTE, PIQUETEROS, PETROLEROS, BANCARIOS, DOCENTES, ESTATALES, LEAR, TELEFÓNICOS, INUNDACIONES Y ESTUDIANTES
2014 NO TERMINÓ: POR UN CONGRESO ABIERTO DEL FRENTE DE IZQUIERDA
QUE VOTE PLAN DE LUCHA Y EXIJA PARO NACIONAL DE LAS CGTs Y LAS CTAs, RECHACE LAS PASO Y SUME AL NUEVO MAS Y TODOS LOS LUCHADORES
Cristina aprovechó el fin de su licencia médica para atacar directamente al movimiento obrero, estudiantil y popular. Lo hizo brindando en el Hotel Sheraton de la mano de capitalistas de la Cámara Argentina de la Construcción y burócratas sindicales vinculados a la última dictadura militar como “batallón 601” Gerardo Martínez de la UOCRA. No se privó, tampoco, de contar con la presencia de Mauricio Macri y brindarse mutuamente elogios sobre “el crecimiento de la construcción en los últimos años” y comprometerse a que “continuen los logros en el próximo gobierno”. El pacto K-PRO en torno a la especulación inmobiliaria y su carácter rabiosamente anti-popular ocupó el centro de la escena política.
En su discurso, la presidenta pidió “comprensión” a los trabajadores y amenazó con las consecuencias de la bancarrota capitalista mundial. En tono absolutamente cínico, señaló que la Argentina tiene el mejor salario en dólares y el mejor poder adquisitivo en América Latina mientras que en Alemania y Francia se está discutiendo no dar aumentos salariales por los próximos 3 años. Evidentemente, la presidenta está más preocupada por mostrar “cuán mal podríamos estar” comparando estadísticas, que en caracterizar la propia situación del país. Hoy, tanto oficialistas como opositores reconocen que hay una disminución del poder adquisitivo y que las paritarias cerraron por detrás del 40% de inflación anualizada. Esto lo admite incluso la propia burocracia oficialista (Yasky y Caló). Se trata, por lo tanto, de una situación innegable. Por eso Cristina nos dice “comprendan”, es decir, acepten pasivamente el Rodrigazo.
Tan reaccionario fue su discurso, que también se dedicó a reivindicar la destrucción de la educación pública. Textualmente, dijo que “sobran abogados, psicólogos y contadores”. Se trata de una provocación en el marco de la actual asfixia presupuestaria que sufren las universidades y escuelas en todo el país.
Como cierre, Cristina dedicó su intervención al estallido de fin de año. Dijo que "esperemos que en diciembre no empiecen con las efemérides que acostumbran a hacer a partir del 2001" y agregó que "está todo armado, preparado y ya nos dimos cuenta todos". En la misma línea, Berni avanza en un “plan anti-saqueos” militarizando todo el país, postergando las vacaciones de todos los agentes para después de diciembre y saludando junto a Scioli la jura de nuevos 10 mil agentes en la Provincia de Buenos Aires. Al mismo tiempo, Rossi ha salido públicamente a exigir a Binner “que se haga cargo de contener a Barrios de Pie para evitar saqueos”. Se trata de un apriete político al cual Binner no ha respondido, y ya en otras ocasiones el presidenciable del PS ha salido a atacar la protesta piquetera.
DE LA PRIMERA A LA SEGUNDA ASAMBLEA ABIERTA: EN MENOS DE UN MES, EL DESARROLLO DE LA TPR Y LA AVP
Todos estos elementos, junta al potente torrente de lucha obrera que sacude este fin de año, muestran el acierto del documento político de la Asamblea Abierta del 1 de Noviembre que hicimos en el Obelisco así como nuestros documentos del IV Congreso de la TPR. Esta elaboración supo guiar nuestra intervención como Tendencia Piquetera Revolucionaria y Agrupación Villera Piquetera en las últimas semanas. Para los revolucionarios, no se trata de cotejar la realidad con nuestras premisas (método de la secta, “teníamos razón”) sino de verificar que nuestra orientación nos permitió progresar en el marco de la confrontación histórica entre partidos y clases. De hecho, nuestro protagonismo mediático logrando repercusión en la prensa escrita (Clarín, La Nación, etc.) y la aparición televisiva de nuestro compañero Juan Marino en el piso de Intratables son muestras palpables de nuestro acierto político. Esto se vio verificado, a su vez, en la apertura de una nueva asamblea piquetera en el barrio Los Piletones y la conquista de un compromiso por parte del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación de alimentos para 150 familias. Lo mismo se ve en el plan de lucha de transporte que se suma al plan de lucha de bancarios, docentes, piqueteros y al paro de petroleros. El plan de lucha que reclamábamos ya es una realidad y nuestra orientación política sirve para catalizar y darle una expresión organizada y general a esta tendencia objetiva que hay en el movimiento obrero y popular hacia un fin de año con plan de lucha y paro nacional.
2014, sin lugar a dudas, será recordado como el año de 3 paros nacionales, las huelgas indefinidas de docentes, la lucha obrera de Lear, Gestamp y Donnelley y la iniciativa obrera desplegada por todos los gremios a nivel nacional por el bono de fin de año. El plan de lucha contra el estallido y el Rodrigazo de Cristina-Kicillof ya empezó. El resultado final depende de si la dirección de la lucha queda en manos de la burocracia sindical traidora o logramos conquistar una nueva dirección de los sindicatos en manos de la izquierda y el clasismo.
2015: CONTRA EL TRIPLE EMPATE DERECHISTA Y LA LIQUIDACIÓN DEL PROGRESISMO, VOTAMOS AL FRENTE DE IZQUIERDA Y DE LOS TRABAJADORES
Esa lucha estratégica por los sindicatos tendrá su cauce, a su vez, en la enorme lucha política que ya se está desplegando de cara a las elecciones 2015. Por un lado el gobierno apuesta a prolongar el ascenso de la imagen de Cristina luego del choque pro-imperialista con los buitres. Se especula con la posibilidad de no acordar con los buitres en enero cuando venza la clausula RUFO mientras Kicillof emite deuda y va a Brasil con Capitanich para tratar de que Dilma compre la deuda a los buitres. En esa misma línea, buscan no clarificar quién será el candidato presidencial del kirchnerismo distribuyendo su apoyo entre Scioli, Randazzo y Urribarri por igual. El objetivo de este “operativo distracción”, como lo calificó la prensa, es evitar un desplazamiento de la figura de Cristina por alguno de los candidatos presidenciales y, de esta forma, condicionar la lista de candidatos hasta último momento al máximo. No se descarta, en este sentido, que el vicepresidente de Scioli sea el “ministro anti-buitre” Kicillof.
Se trata de una impostura reaccionaria porque mientras montan todo este operativo la realidad es que ya han lanzado una nueva emisión de deuda soberana “dollar-linked” (atada al precio del dólar oficial). En octubre emitieron el Bonad 2016 por 983 millones de dólares y en noviembre el Bonad 2018 por 653 millones de dólares que terminaron totalizando unos 2 mil millones de dólares. Este saqueo capitalista de las arcas estatales es lo que explica, ante todo, la “baja del dólar blue” (paralelo e ilegal) y explica la verdadera política del kirchnerismo ante la bancarrota nacional y el default en que se encuentra el país.
De cara a los presidenciables, se ha consolidado una situación de triple empate entre Scioli. Macri y Massa. La amenaza de que el ciclo kirchnerista culmine con un gobierno de la derecha ya sea por fuera o por dentro del kirchnerismo se plantea como un peligro concreto. Esto potencia la derechización y destrucción del progresismo bajo la explosión de sus propias contradicciones. La izquierda kirchnerista, otrora enemiga de Scioli, ahora le descubre las virtudes al ex funcionario menemista. El progresismo del FAUNEN se encuentra en una crisis terminal no sólo por la ruptura de Carrió sino por la propia crisis de la UCR. Hoy en día el radicalismo está dividido entre los que prefieren a Massa (encabezados por Gerardo Morales de Jujuy, José Cano de Tucumán y Luis Naidenoff de Formosa) y los que prefieren a Macri (encabezados por Aguad de Córdoba quien ya llegó a un acuerdo provincial con el PRO y Juez). En ese marco, Sanz, Cobos y Alfonsín, lejos de ser retractores de los acuerdos con la derecha especulan sobre las ventajas de una interna abierta de toda la oposición, habilitaron los acuerdos provinciales y ellos mismos tienen una trayectoria de pactos con la derecha (basta recordar el sojazo de Cobos y la UDESO de Alfonsín en provincia de Buenos Aires con De Narváez). Se verifica la tesis de la TPR que plantea que, si es cierto que el progresismo se define por oposición a la derecha, el progresismo es directamente proporcional a cuán lejos se está de la UCR. El radicalismo es el vehículo de la derecha al interior del progresismo y funciona como un caballo de troya para implosionar al progresismo. Por eso no faltan los que especulan con el relanzamiento del FAP con la candidatura presidencial de Binner. Todo este proceso de derechización política está impulsado por el fracaso terminal de las formaciones progresistas y nacionalistas, de un lado, y por las consecuencias de la bancarrota capitalista internacional del otro. La disolución de los presidenciables progresistas o nacionales y populares responde a una polarización social y política en curso. No se trata de un desarrollo unilateral de la derecha sino que, a 13 años del Argentinazo, los trabajadores han podido construir una tentativa política propia con el FIT para superar los límites y la capitulación del kirchnerismo.
Desde la TPR denunciamos la impostura de saludar la salida de Carrió por parte de Libres del Sur y el GEN porque su objetivo es ocultar el fracaso de una estrategia política reaccionaria y salir al rescate del derechista FAUNEN. A su vez, advertimos que el relanzamiento del FAP (una medida elemental si no pretenden terminar siendo colectora de Massa o Macri gracias a la UCR), no sería más que la re-edición de un proyecto fracasado. En ese fracaso, de hecho, ya se encuentra lanzada la UP de De Gennaro que probablemente contará con el MST y Patria Grande para fundar lo que hemos denominado desde la TPR como “mini-FAP”. La propuesta de relanzar un polo progresista desconoce, a su vez, la conclusión histórica de que su único objetivo concreto siempre fue acumular para luego entregar ese capital político a la UCR. Por algo todas las expresiones desperdigadas del progresismo se han ganado el humillante mote de “pan-radicalismo”. Así fue con el FREPASO y así fue con el FAP. En este mismo marco, se ubica la contradicción abierta entre Barrios de Pie y Binner. No se puede ser piquetero y ser democratizante y pro-imperialista. Se trata de dos proyectos políticos incompatibles. Por lo tanto, se plantea la ruptura estratégica con el progresismo reaccionario que concilia con la UCR y la derecha. Está planteado el pasaje abierto de esa base popular al campo político de la izquierda expresada en el FIT.
Para romper con la polarización reaccionaria del triple empate, es necesario apostar al desarrollo de una alternativa obrera y socialista por medio de las candidaturas del Frente de Izquierda. En este sentido, el desarrollo exponencial del Partido Obrero en Salta, donde derrotó al PJ y la derecha en Salta capital, y su posicionamiento con intención de voto en primer lugar y por encima del 30% para las elecciones provinciales de Salta, muestra que hay una disputa concreta desde donde los luchadores podemos apostar a barrer no sólo con las candidaturas derechistas sino directamente con los partidos patronales, abriendo paso a un nuevo desarrollo político de los explotados a escala histórica. En 2015, está planteada de forma concreta la conquista de un gobierno de los trabajadores. Esto, junto a la derrota de la burocracia sindical en elecciones recientes como la de UTA y petroleros, integra un proceso histórico de emancipación de los trabajadores en nuestro país.
EL GOBIERNO DE CRISTINA FRACASÓ EN REGIMENTAR AL MOVIMIENTO OBRERO: 20N - JORNADA NACIONAL DE LUCHA Y PARO NACIONAL DE LA CTA-AUTÓNOMA. 25 - MARCHA A PLAZA DE MAYO CONTRA LA VIOLENCIA HACIA LA MUJER. 26N – JORNADA NACIONAL PIQUETERA. 27/28 DE NOVIEMBRE – ASAMBLEAS, QUITE DE COLABORACIÓN Y MARCHAS EN LOS GREMIOS DEL TRANSPORTE
En este cuadro político, se da el debate sobre el poder adquisitivo y la legitimidad del reclamo de un bono de fin de año. Según el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), consultora privada vinculada al equipo económico de De la Sota, al comparar los aumentos salariales con el crecimiento inflacionario y la presión del impuesto a las ganancias el poder adquisitivo de un trabajador habrá disminuido entre un 8,5 y un 13,7% al final del año. En un 2014 que cierra con una inflación cercana al 40% se asumen tres escenarios de incremento en los salarios nominales: del 28%, 30%, y 32%. La pérdida de poder adquisitivo del salario en cada caso, sin considerar los efectos de la falta de actualización de los parámetros de cálculo del impuesto a las ganancias, sería del -8,6%, -7,1%, y -5,7%, respectivamente.
A su vez, con respecto al impuesto al salario, “(…) para poder compensar la pérdida de ingreso, el empleado del primero de los casos (que cobra $16.000, NdR) necesitaría $ 21.995 más al año, cerca de $ 5.611 por el impuesto y $ 16.384 por la inflación. En el segundo de los casos (que cobra más de $25000, NdR) se requeriría un adicional de $ 38.380, $ 15.609 para compensar el impuesto y $ 22.770 por la inflación.” (Cronista, 29/10) Se trata, por lo tanto, de una situación innegable.
La legitimidad de estos reclamos es tan evidente que la tesis kirchnerista de que “en 2014 hubo una recuperación del poder adquisitivo del salario y no un deterioro” (declaraciones de Capitanich, 16/10) es tan poco creíble que incluso el gobierno ya no puede controlar a su propia tropa ni a su propia burocracia sindical. La orientación anti-obrera y anti-lucha del kirchnerismo ha sido refutada por completo.
Esto se verifica en que tanto Yasky como Caló (¡y hasta el INDEC!) han tenido que reconocer lo que ya era innegable. Por eso las burocracias oficialistas se han sumado al pedido de un bono de fin de año y plantean que no se aplique el impuesto al salario sobre los aguinaldos de diciembre. Esta última posición es muy distinta al reclamo del clasismo de eliminación lisa y llana del anti-obrero impuesto al salario pero no deja de ser un choque concreto con la política reaccionaria del gobierno nacional. La regimentación estatal kirchnerista de la burocracia sindical se está resquebrajando bajo la presión directa de la bancarrota capitalista y la fuerte intervención obrera y popular.
Se trata de una profunda derrota política e ideológica del kirchnerismo que durante todo el año, tanto frente al paro nacional del 10 de abril como el paro nacional del 28 de agosto, y en cada lucha obrera de envergadura (huelgas docentes, Lear, Gestamp, Donnelley, estatales, petroleros, piqueteros, entre otros), atacó a los luchadores directamente por cadena nacional y pretendió negar la legitimidad de sus reclamos impugnándolos por, supuestamente, ser una “protesta política”, “funcional a los buitres”, “funcional a los patrones”, “responsables de las suspensiones y despidos” o que “buscaba desestabilizar al gobierno”.
Aplastar las luchas se transformó en una cuestión de Estado que contó con un involucramiento directo de la Presidenta. Sin ir más lejos, Cristina ironizó contra los reclamos obreros declarando en el congreso de ADIMRA Joven que “si los empresarios pueden dar un bono debe ser que no están tan mal”. En la misma línea, en conferencia de prensa Capitanich declaró que “’no es posible ningún tipo de reapertura de paritarias’ y ‘tampoco forma parte del proceso de discusión’ cualquier modificación al Impuesto a las Ganancias” (Página 12, 17/11). En esta cruzada reaccionaria el gobierno no estuvo solo. En todo momento, con distintos matices, el kirchnerismo contó con el apoyo de los Massa, Macri y Binner para atacar la lucha del movimiento obrero y popular.
Ahora, con las centrales sindicales oficialistas sumadas a los reclamos e incluso dando libertad de acción a los gremios que consideren necesario impulsar medidas de lucha, la legitimidad y la autoridad del movimiento obrero, los explotados y la izquierda como representante político de sus intereses es incuestionable. Las jornadas de lucha, por lo tanto, no son el producto espontáneo o derivado de que “la crisis económica no se aguanta más” ni tampoco un choque de aparatos por arriba entre la burocracia y el gobierno sino que es la victoria de una lucha política que hemos librado desde la izquierda y el clasismo por imponer un plan de lucha contra el Rodrigazo de Cristina-Kicillof. Por medio de una lucha política tenaz y ante una crisis evidente a los ojos de todos, hemos desautorizado la impostura del kirchnerismo y la oposición pro-imperialista.
Esa es la razón por la cual en las últimas dos semanas tuvimos cuatro jornadas de lucha (el 20N, la marcha contra la violencia hacia la mujer, las marchas piqueteras y el paro del transporte) que pondrán en el centro del debate político nacional la agenda de los explotados. En función de esta perspectiva, desde la TPR llamamos a toda la izquierda y el clasismo a reconocer este escenario excepcional y explotar políticamente esta crisis que atraviesa la burocracia sindical para desenvolver a fondo estas tendencias de lucha hasta conquistar todas las reivindicaciones.
LA BUROCRACIA SINDICAL QUIERE CONQUISTAS EN 2014 PARA REVENTAR LAS PARITARIAS EN 2015
El plan de lucha del transporte ha abierto un debate de envergadura en el clasismo: ¿cómo debemos intervenir? En primer lugar, lo primero que queremos señalar es que la burocracia no ha tomado un camino de lucha sino que su ruptura con el gobierno tiene por objetivo reventar las paritarias 2015. Ese es el verdadero temor de la burocracia. De hecho, no hay que confundirse: el reclamo de un bono de fin de año busca esquivar la reapertura de las paritarias. Los acuerdos sectoriales están en sintonía con la tregua que defiende toda la burocracia sindical. Moyano mismo había declarado en octubre para boicotear la convocatoria a un nuevo paro nacional en noviembre que “el que venga después de Cristina tendrá que aplicar medidas muy duras y habrá que acompañarlo" (La Nación, 21/10). Esto deja en claro que la burocracia moyanista, impulsora de los paros nacionales del 10 de abril y el 28 de agosto, ahora se ha sincerado y se reclama abiertamente como defensora del ajuste. Lo mismo vale para Caló y Yasky quienes siguen sin lograr ningún tipo de concesión por parte del gobierno no dudan en “reivindicar al modelo”.
Por último, el propio Micheli, que sí convocó a una jornada nacional de lucha, se reunió con el Papa Francisco y declaró: “si no hay respuesta, diciembre se va a poner muy duro. La gente no llega a fin de mes, está re-mal, y ya varios sectores piqueteros han anunciado que van a ir a los supermercados, aunque lo van a hacer organizadamente, sin romper nada. Ahora a eso se le puede dar una respuesta empezando un diálogo y viendo cómo se resuelve. ¿No se puede 4000 pesos para todos? Bueno, discutamos de qué manera, pero no se puede ni hablar. A los pocos que recibe Capitanich, porque ella no recibe a nadie, la respuesta es nada” (La Nación, 19/11). La conclusión es que ya el propio Micheli se está bajando del reclamo para tratar de conseguir algo y, ante la intransigencia del gobierno, no decide darle continuidad al plan de lucha sino que se suma a la parálisis de la burocracia sindical. La burocracia ve el estallido de fin de año producido por el gobierno y decide dar un paso al costado en lugar de darle un cauce positivo a la bronca popular.
En este cuadro, el plan de lucha del transporte plantea una gran oportunidad para los luchadores. Moyano declaró que "el bono de fin de año está, lo vamos a sacar de cualquier manera". Está en debate también la unidad de las CGT junto a la central oficialista, Moyano señaló: "Se está conversando y avanzando sobre ese tema. Hay mucha voluntad, queremos hacer algo que tenga objetivos claros y no hacer la unidad por la unidad". Para Moyano, "si la unidad es para reclamarle firmemente al gobierno, sería importante" y agregó: "La CGT unida va a tener firmeza en su reclamo, no sé si va a ser opositora o no. Pero el Gobierno tiene fecha de vencimiento. Después de eso ¿a quienes van a aplaudir los de la CGT oficialista?". Por otra parte, el secretario adjunto de Camioneros, Pablo Moyano, señaló -en declaraciones a Luis Novaresio en radio La Red- que los camioneros "ya votaron hacer un paro general de 24 o 48 horas antes de fin de año (...) y no se descarta una movilización a Plaza de Mayo con todo el transporte incluido".
Las tareas, por lo tanto, están claras. En primer lugar, contra la unidad por arriba que plantea Moyano para meter el ajuste (“contra el avance de los troskos” como diría Macri), está planteado votar mandatos por un plan de lucha y paro nacional unificado de las CGTs y las CTAs. A su vez, en el transporte, tenemos la tarea de darle continuidad al plan de lucha apoyándonos, sobre todo, en la clara tendencia combativa que anida en el sindicato camionero. Las palabras de Moyano diciendo que “el bono de fin año ya está” tienen que ser un aliciente para exigirle medidas enérgicas de inmediato. Al mismo tiempo, como hay un tendencia que entra en contradicción con la parálisis de la dirección burocrática, tenemos que impulsar medidas de lucha por fuera de la burocracia donde el protagonismo de la izquierda y los luchadores sea indudable. Esto tiene que ser un instrumento para convocar a la base kirchnerista de los gremios que boicotean la medida con la burda excusa de que “es un paro de la burocracia” o, mucho peor, “un paro patronal”. Desde la TPR desautorizamos esa campaña contra la lucha del movimiento obrero y marcamos que la legitimidad de los reclamos no puede ser cuestionada en función de quién dirige la lucha. Los luchadores no siempre podemos elegir bajo qué dirección luchamos pero siempre vamos a elegir luchar por nuestros intereses. Este fin de año exige la conquista de todos los reclamos.
LAS “PASO ABIERTAS DEL FRENTE DE IZQUIERDA”... CON EL EVITA Y UNIDAD POPULAR: UNA CAMPAÑA DEL KIRCHNERISMO CONTRA EL FIT Y EL PARTIDO OBRERO
Este fin de año, a su vez, encuentra a la izquierda en un estado deliberativo de cara a las elecciones de 2015 y a espaldas del plan de lucha que el movimiento obrero, piquetero y popular está protagonizando. Si bien los compañeros tienen un indudable protagonismo en los movimientos de lucha, la realidad es que tanto el congreso del 8N del PO en el Luna Park como el congreso del 6-D del PTS, el 5-D del MST o el 6-D del Nuevo MAS no discutieron o van a discutir el impulso de un plan de lucha de la izquierda y los luchadores contra la parálisis de la burocracia sindical. La fiebre electoral no sólo es autista con el actual proceso de lucha sino que cada uno de estos congresos no fija posición ni establece una propuesta sobre las deliberaciones de las otras organizaciones. Por el contrario, al igual que en nuestra asamblea del 1N, la TPR quiere cerrar su deliberación estableciendo un debate con los compañeros y fijando una propuesta de militancia común de cara a 2015.
En primer lugar, queremos marcar que cuando ya todos los partidos patronales han iniciado la campaña electoral, en el Frente de Izquierda tiene lugar una hemorragia cuyo origen es la misma herida originaria que denunciamos desde la TPR cuando dijimos "ASÍ NO" en 2011. Nos referimos a la extorsión morenista contra el Partido Obrero. En el caso actual, es el PTS quien impide el lanzamiento unificado inmediato de la campaña electoral. Enredada en una pugna faccional donde Nicolás del Caño quiere colocar su candidatura en oposición a Jorge Altamira, el FIT aparece en crisis cuando debería estar abocado a explotar sistemáticamente las crisis de los partidos patronales y sus agrupamientos en liquidación. Tan burda es la campaña del PTS que toma como propios los argumentos más absurdos del kirchnerismo contra el FIT: es necesaria una “nueva generación”, “tiene que haber una renovación” y que “siempre se pueden usar las PASO”. O sea que las PASO, de mecanismo proscriptivo y reaccionario del Estado contra las organizaciones populares, ahora serían una instancia para la deliberación popular. A su vez, la tesis de la renovación es totalmente infundada porque no hay ni un sólo ejemplo donde el movimiento obrero y popular se haya colocado en oposición al PO de la mano del PTS. Por el contrario, los casos donde efectivamente hubo un desarrollo político de los explotados por fuera del PO como en el Estudiantazo, el Indoamericano, la lucha contra la base yanqui en Chaco u otras luchas del movimiento piquetero fuimos la TPR y la Coordinadora en defensa del FIT, y no el PTS, quien estuvo a la cabeza de esos levantamientos populares. O sea que es totalmente infundado el reclamo presidencial del PTS.
Con su campaña de provocaciones y usurpaciones constantes, el PTS verifica la denuncia que establecimos en abril de 2011 como TPR en la fundación misma del FIT: “no es un frente de izquierda, es un pacto contra el Partido Obrero”. El FIT se encuentra estratégicamente condicionado por las extorsiones del democratizante PTS. Esto es un vehículo de la presión del kirchnerismo contra el Frente de Izquierda. El PO teme enfrentar esa presión porque no termina de clarificar a su interior si el éxito del FIT se debe a una victoria estratégica del Partido Obrero contra el kirchnerismo y la oposición pro-imperialista o un casamiento de mediano plazo donde el PO es rehén del morenismo. El PTS tiene derecho a opinar y decir lo que quiera. Lo que no tiene derecho es a pretender tener derecho de veto sobre la mayoría del FIT y extorsionar al resto. Desde la TPR decimos: cortemos la hemorragia de las PASO. Que la mayoría del Frente de Izquierda tome una resolución y la haga respetar.
Esta crisis hay que cortarla porque, luego de que el MST instaló una campaña faccional por las PASO con el FIT encubriendo que quiere licuar a la izquierda detrás de De Gennaro-Lozano, el PTS ahora interviene con el mismo eje, desconociendo que las PASO ya han sido rechazadas por la mayoría del FIT, no sólo por el Partido Obrero, que supera con creces al PTS e IS, sino también por Izquierda Socialista. El PTS está en minoría, no lo quiere reconocer y por eso pretende imponer el sentido patronal reaccionario a favor de las PASO, que es sólo para abrir el juego al kirchnerismo. No por nada los periodistas le dan la razón al PTS diciendo “si hay PASO para el gobierno y la oposición, ¿por qué el FIT no va a tener PASO?”. Quieren usar las PASO como un elemento de extorsión de la minoría contra la mayoría apoyada en la intervención estatal.
A su vez, el carácter objetivamente kirchnerista y anti-FIT de la campaña por las PASO se comprueba de manera burda en que casi instantáneamente Patria Grande vio el hilo de sangre y pretende instalar un debate que incluya no sólo a la UP (como dice el MST) sino también al Movimiento Evita, la CTEP y el MTE. Vale decir que el Movimiento Evita no tiene ninguna intención seria de participar, dado que Taiana ha reiterado una y otra vez que quiere ir a la interna del FPV con Scioli y en Córdoba, la provincia de las redes de trata y los feminicidios, ya han dicho que van a apoyar la candidatura de Acastello, el intendente de Villa María y centro reconocido de las redes de trata. La CTEP y el MTE, por su parte, se constituyen en contra del movimiento piquetero y contra la izquierda, tributando incluso a la Iglesia y en especial a Bergoglio. En este mismo sentido, la pérfida campaña de Patria Grande coloca como consigna “unidad en las calles, unidad en las urnas” cuando Patria Grande BOI-CO-TEÓ el paro nacional del 20N convocado por la CTA-Autónoma por medio de una marcha a la Legislatura junto al Evita. Más kirchnerista imposible. Lo mismo puede decirse de la “izquierda kirchnerista” que podrá jactarse de inserción popular pero se ha dedicado sistemáticamente atacar los paros nacionales y los piquetes de la izquierda. ¿De qué “unidad en las calles” nos hablan, entonces?
A la campaña por las PASO abiertas del FIT respondemos: ninguna PASO con el kirchnerismo que boicoteó los paros nacionales ni con la burocracia michelista, democratizante y pro-imperialista de la UP. Rechazamos las PASO con quienes no coincidimos en impulsar un plan de lucha y con quienes apoyan las negociaciones con los buitres (kirchneristas) o proponen una asamblea de acreedores (Lozano). Nuestra política es el NO pago de la deuda externa. En este sentido, a Patria Grande y el MST les planteamos que la unidad sólo puede conquistarse rompiendo con Lozano, el Evita y la UP. Ellos no son luchadores y el hecho de que ustedes sostengan mil y un pacto con ellos (como la CTEP, las listas comunes con la burocracia en la CTA o, mucho peor, la convocatoria a las PASO con sus partidos) los desnaturaliza fuertemente a ustedes mismos. La unidad de los luchadores solamente puede conquistarse en ruptura con el kirchnerismo y con cualquier intento de reedición del FAP.
QUE EL FRENTE DE IZQUIERDA SUME AL NUEVO MAS Y A TODOS LOS LUCHADORES
Por último, la conquista de la personería nacional por parte del Nuevo MAS es otra razón para convocar el congreso abierto del FIT y sumar a todos los luchadores este fin de año. Recordemos que el FIT rechazó la inclusión del Nuevo MAS con el criterio de que este no tenía personería electoral nacional y exigía más cargos de los que les correspondía. Ahora el Nuevo MAS consiguió su personería y plantea discutir las candidaturas: no hay ningún argumento válido para no sumarlos al FIT, según los propios criterios del FIT.
A su vez, la pelea por incorporar al Nuevo MAS al FIT tiene un alcance estratégico contra la propia deriva derechista del Nuevo MAS: mientras proponen ingresar al FIT, han lanzado un pronunciamiento para discutir en igualdad de condiciones con Luis Zamora una “alternativa socialista unificada”. Esto último, teniendo en cuenta el rechazo intransigente de Zamora al FIT, no es más que una maniobra para sumarse a la campaña faccional de Zamora. Si consideramos, a su vez, que Zamora no es más que un resabio porteño, podría significar que el Nuevo MAS estaría preparando un acuerdo con Pueblo en Marcha (FPDS). Todo un operativo chavista y autonomista para atacar al FIT y bloquear su desarrollo a nivel nacional.
Llamamos a los compañeros del Nuevo MAS a no repetir los mismos métodos expulsivos y democratizantes que el FIT usó contra ustedes contra el resto de los luchadores. Es completamente absurdo que, por un lado, denuncien al FIT por electoralista y que, al mismo tiempo, convoquen a Zamora en igualdad de condiciones cuando es harto evidente que lo único que tiene Zamora para aportar a un frente son votos. Todos los luchadores, tenemos que reclamar al Nuevo MAS que desarrolle esta orientación, en oposición a una coalición con Luis Zamora, que sólo sirve para intrigar y mostrar que el propio MAS no quiere entrar al FIT. Si el MAS entra, es una victoria de todos los luchadores.
Llamamos al FIT, a su vez, a intervenir enérgicamente en esta crisis política planteando la incorporación del Nuevo MAS al frente junto a todos los luchadores que no convocamos a mecanismos burocráticos como las PASO con otros partidos para atacar al FIT. De esta forma, el Frente de Izquierda tendrá la capacidad de dar una respuesta homogénea a la campaña del kirchnerismo y el chavismo en su contra y podrá lograr reagrupar detrás de sus filas a los que coherentemente hemos dado una lucha política en las elecciones contra Cristina, la derecha, FAUNEN y el FAP.
Por último, en caso de que el Nuevo MAS logre ingresar al Frente de Izquierda y se siga teniendo una actitud faccional contra quienes integramos la Coordinadora en Defensa del Frente de Izquierda (TPR, Movimiento Clasista y Combativo, Movimiento 20 de Diciembre y CC-POR), esta asamblea llama a sacar todas las conclusiones del hecho. Si un partido logra ingresar sobre la base de conquistar su propia personería nacional contra el FIT, y otro no por haber dedicado sus fuerzas a defender al Frente de Izquierda, los resultados estarán a la vista de todos. Es decir, la dirección del Frente de Izquierda nos forzará a una campaña por conquistar personerías a nivel municipal, provincial y nacional para poder lograr algo tan elemental como la unidad de los luchadores. Entendemos que ese sería un desarrollo negativo y que sería volcar un debate a la masa de luchadores que debería poder procesarse al interior del Frente de Izquierda por medio de un Congreso abierto.
Con este planteo, un congreso abierto del FIT para fin de año donde se resuelva un plan de lucha, un llamado a paro nacional de las CGTs y las CTAs y la incorporación del Nuevo MAS y todos los luchadores, abrimos el debate a esta segunda asamblea abierta de la TPR en el Obelisco. En este mismo sentido, queda hecha la invitación a todos los luchadores al Congreso Villero-Piquetero que haremos el 6 de diciembre en el Barrio Charrúa.
TPR
TENDENCIA PIQUETERA REVOLUCIONARIA
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